Los atléticos adelantaron el regreso de unas vacaciones pasadas por agua para volver al lugar común, al de siempre. A ese del que no se quieren mover para ir a otros estadios, aunque les vendan que serán de cinco estrellas. Mire, no lo necesitamos, los bares de los aledaños ya están suficientemente provistos de cinco estrellas, y de San Miguel, y de Estrella de Galicia, que para muchos es la mejor.
Acudieron con algo de antelación llevando a la niña y al niño de la mano. Los pequeños marchaban ilusionados, pero sus progenitores no demasiado. Pensaban en la paradoja del día. Día del niño, sí. Pero organizado por aquellos que no parece que vayan a dejar un Atleti reconocible para ellos, para los innumerables niños que sueñan en rojo y blanco. Los niños no son tontos, quizá algo malcriados y tal vez cabroncetes, pero tontos no, y notaban algo raro en sus padres. Les agarraban la mano con tensión. Y no porque no les gustara éste tipo de eventos, no, que muy acostumbrados están, que para eso renovaron el carnet de Parques Reunidos y hasta se conocen los nombres de pila de varios de los pingüinos de Faunia. Estaban fastidiados porque no les acababa de convencer eso de participar en celebraciones auspiciadas por los del palco. Porque creen que amar estos colores es algo más que inflar tres o cuatro castillos de plástico y pagar horas extras a un mapache de peluche acogido a reducción de jornada de cuarenta y cinco minutos. Aún así, intentaron que no se notara, dejaron a sus retoños en brazos de algún voluntario de sonrisa aliñada con corrector dental y se pusieron a un lado mirándolos disfrutar con expresión bobalicona. Ya habría tiempo de explicarles lo que pasa porque ellos son el futuro de esto y no las alianzas estratégicas con otras sociedades de países emergentes. Más adelante les contarían por qué últimamente la bufanda con los colores de siempre disfruta de una excedencia en el armario y qué representan los colores verde y oro. Ya habrá tiempo para que los niños conozcan el significado de palabras como apropiación, indebida, cooperador, comisiones. Pero no ahora. A costa de la ilusión de ellos, no. Como mucho les intentarán explicar qué es una paradoja, aún a sabiendas de que se pudieran convertir en unos niños redichos, usuarios de palabras altisonantes como lo debió ser en su infancia nuestro actual entrenador.
Rendía visita al Calderón el Levante, equipo entrenado por un colchonero declarado que nos puso la cara roja en el encuentro de la primera vuelta. Equipo admirable por la temporada que está haciendo. Equipo que intenta jugar al fútbol con lo que tiene, aspecto éste que no es baladí en estos tiempos en los que se celebra abiertamente el paso atrás que acaba de dar el fútbol español. Así son las cosas amigos, después de celebrar éxitos mundiales y europeos con un estilo reconocible y vistoso, ahora lo que pita es maltratar y despreciar el balón y los trofeos, sacando pecho por ello. Serán los signos de estos tiempos llenos de paradojas en los que no queda claro si te vas a jubilar a los 110 o si debes ir en autovía a 67 por hora. Será también que las copas deben estar aseguradas, aunque sea a terceros, que nunca se sabe cuando puedes tener un golpe con un autobús.
Presentaba muchas bajas nuestro equipo, por sanción, por lesión o tal vez por exceso de torrijas. Nueva oportunidad para amarrar la clasificación europea, a la competición pobre, a la que los equipos como el nuestro acceden por la gatera de la no consecución de objetivos. Salió el Atleti raro, como tantas otras veces en las que no sabemos si el equipo tiene sueño o le están saliendo los dientes. Algo inapetente y menos dado al aprendizaje alrededor del balón por la falta de Tiago. Entonces llegó un señor gol de Elías, ese niño del que se duda tal vez injustamente por haber llegado de la mano de quien vino. Entonces empezó la cosa a ir mejor, sobre todo por el crecimiento de Mario Suárez. Mario no ha parado de crecer desde que ha pasado de la guardería del banquillo al parvulario titular. Quizás nosotros no nos demos cuenta del todo, por eso de que le vemos todos los días, pero si ponemos su fútbol en la pared dónde le medimos constatamos que sí, que ha crecido mucho en los últimos tiempos y que cada partido que pasa supera con creces la raya anteriormente marcada con lápiz. Aunque a veces haga alguna chiquillada como cometer un penalty por arriesgar demasiado. Aunque el penalti solo fuera una consecuencia lógica de la enésima desconexión de los nuestros, siempre dado a dar un paso atrás cuando el marcador se pone a favor.
Empezó la segunda parte y daban ganas de poner la mano en la frente al equipo. Pues calentura no tiene, decían algunos. Será un virus, algo que explica lo inexplicable en estas cuestiones, decían otros muy serios. Lo que era seguro era que el equipo no quería comerse ni el puré ni el yogur, y miraba con ojos de que el puré se lo iba a comer nuestra señora tía, la del pueblo, esa que cuando ve al sobrino ametralla sus mofletes con besos de repetición. Y ahí surgió el niño prodigio, el genio precoz: Agüero. Al Kun no se le debe nunca perder de vista, lo mismo te abre el cajón de las medicinas y se toma dos ibuprofenos, que mete un gol tras varios rebotes. A partir de ahí, partido plácido. Goleada no del todo merecida. Alguna que otra buena noticia: Filipe ya come sólido por su banda, las primeras palabras de un Juanfran hiperactivo y ansioso, un Diego Costa que ya casi lee de corrido, un Raúl García cumplidor, la vuelta de Domínguez, el debut de un nuevo retoño, Noguera. Y la grada, feliz. Acordándose del entrenador para bien y del palco para mal. Contenta a pesar de que a veces castigaría al equipo sin postre, pero es lo que tienen estos rojiblancos que son la niña de nuestros ojos, hacen una gracia y les perdonamos casi todo ¡Qué paradojas!
Metidos ya en el atasco tras el partido, los niños miraban por las ventanillas la marea de colchoneros que se dispersaban hacia sus casas. La niña, siempre tan observadora, se dirigió a su madre:
– Mamá, ¿cuánta gente es del Atleti?
– Mucha, cariño, mucha
– Por eso lleváis las bufandas de ese color, ¿no? Para que el Atleti vuelva a ser grande.
– Sí hija, sí, y volverá a serlo –dijo la madre mirándola por el retrovisor con orgullo y sonriendo a su marido.
Y es que los niños no son tontos, quizá algo malcriados y tal vez cabroncetes, pero tontos no.
Don Emilio:
ResponderEliminarMuy buena crónica.
Yo me sentí un poco defraudado con la escasísima repercusión que tuvo la convocatoria de la protesta contra la directiva.
Más que previsible, por otra parte, después de la manifestación del 10 de abril.
Yo no soy tan optimista como la mamá del artículo. No sé si veré a un Atleti grande.
Lo siento.
Un abrazo
Don Julio, probablemente no era un buen día. Mucha gente faltó y muchos otros no eran aficionados de los de todos los domingos. Tampoco el día del niño rojiblanco ayudó en mi opinión, aunque, por otra parte, ¿qué mejor momento para reivindicar que cuando se homenajea a los atléticos que merecen un equipo mejor?
ResponderEliminarNo desespere, nadie dijo que el camino fuera a ser corto y plagado de flores (ni aunque sean Sánches Flores, añado)
Un abrazo.
Toc, Toc ... ¿Se puede?
ResponderEliminarSoy un tal Tomi, no sé si usted se acordará de mi. Era uno de sus más fieles seguidores (tanto como soy de nuestro Atleti) y le escribo estas líneas para expresarle simplemente lo contento que vuelvo a estar por leerle y disfrutar con usted de nuevo. No sabe cómo le he añorado ...
Lo del día del Niño es una buena idea, hombre. Para algo que hacen bien los impresentables ... EN cuanto a la desilusión que expresa Don Julio, indicadles que yo ya no uso de eso. Tengo bien claro que apenas tengo ya cosas en común con la gente que llena nuestro estadio, y que se creen a pies puntillas que el cuarto puesto es la bienvenida al paraíso. Menos mal que uno ya vivió su auténtico paraíso años ha. Ahora, como diría mi admirado Sabina, uno solo roba y mata ya por necesidad.
Coincido en lo de Luis Filipe, al que le veo que cada día va creciendo más, dentro del grado acomodaticio que está instaurado en el Calderón. Menos mal que tenemos al Kun, que es elque nos recuerda algo de lo que fuimos y que andamos ya tan distantes de ser ... Lo cual me invita a pensar que no durará demasiado. Ya sabe. Con soltar el tan manido y recurrente "los jugadores juegan donde quieren", despachan el bacalao al mejor postor. Por cierto, David De Gea ha dicho por activa y por pasiva en dónde quiere jugar. Pero como esta grada está llena de sordos, pues nada, habrá que complarles a todos sonotones rojiblancos, que los verdes y oro parece ser que también molestan. EN fin.
Un fuerte abrazo, maestro.
¡Don Tomi!, no sabe usted la alegría que nos da volver a verle por aquí. Mi torpeza con los aparatos electrónicos y problemas con las coberturas me impidieron comentar su rentreé en forma de entrada en su blog. Le diría que le mando toda la fuerza que puedo reunir (que no es mucha oiga), pero un atlético como usted no la necesita seguro. Ese es el partido que debemos ganar.
ResponderEliminarSí, sí, significativo lo que comenta, lo de conformarse con cuartos puestos e incluso sextos y querer buscar una excusa para irse a Neptuno de celebración. ¡Con qué poco nos conformamos, amigo! El amigo Neptuno debe andar con los ojos como platos ante la posibilidad de alguna visita despistada por habernos clasificado para la EL.
En fin, lo único digno de celebración es su vuelta.
Ya sabe dónde tiene su casa, además la primera ronda y una de oreja en ese bar que usted conoce de Carabanchel corren de mi cuenta.
Buenos y secos días Don Emilio.
ResponderEliminarVoy a participar por primera vez en su blog, ahora que me envía el enlace periódicamente.
Estando de acuerdo con la mayoría del comentario, hay una cosa en la que estoy en desacuerdo. NO he visto maltratar el balón en la última final de copa ganada por los de enfrente. Creo que el fútbol de toque tras toque tras toque tras toque sin profundidad puede ser múcho más aburrido que el directo de balón en largo. Todo depende de cómo se hagan ambos. el partido del sábado con mucho toque y posesión del Farsa fue más aburrido que el del miércoles. El partido tuvo múcha más emoción que alguno de los últimos que he visto jugar a la rojigualda, que tocaba mucho pero no llegaba un balón en condiciones a la portería contraria. Y soy tan rojiblanco (ahora dorado y verde) como el que más, aunque no odie a los de blanco. Lo que llevo muy mal es la prepotencia (tanto de los de blanco como de los azulgranas, como de otros que porque lleven algún año bueno creen descender de la pata del Cid).
Respecto al club de nuestros dolores. Yo no echo de menos a Tiago, creo que no es necesario y tapa a jugadores con un futuro espléndido,como mario Suárez y Fran Mérida (si algún día el filósofo o quien entrene al equipo le pone en su sitio, que no es la banda) y los que vienen empujando por detrás.
A pesar de los del palco, espero que ahora que parece que se va el viajero permanente, la política de fichajes y subida de jugadores al primer equipo se reoriente. ¡A ver quien le sustituye!
Un saludo de tu auditor favorito.
Si estoy de acuerdo con Don Emilio, y no con su auditor favorito, prometo que no es por peloteo; sino porque hablamos de un partido, la Final de Copa (que es Torneo menor cuando somos otros quienes jugamos Finales, cuando ahora parece el Mega-Trofeo) en el que un equipo tuvo el 79% de posesión y el otro, por lógica, el 21% restante.
ResponderEliminarGanar un Título, con un 21% de posesión, es lo que es. Se disfrace como se disfrace. Se parece mucho a cómo ganó el Inter la Champions y, personalmente, lo entiendo en un equipo modesto que se come a un Grande.
Pero si, quienes ganan Títulos con el cerrojazo y el a ver cuando te pillo, son equipos de la categoría del Inter, o de ese otro Club de Madrid; me parece una lástima. Eso no es fútbol, es como cuando Italia eliminó a Brasil en el Mundial de España: una tristeza, el éxito del inferior, del que asume que lo es y actúa en consecuencia ... y no es eso lo que nos están vendiendo.
Don Fran, Don Emilio, ¿A ustedes el Atleti de Tomislav Ivic les gustaba?
ResponderEliminarTémome que vamos a entrar en un ardoroso debate sobre el concepto del fútbol que tenemos ... Yo soy de los que pienso de que cada uno hace bien en usar las armas que crea más convenientes (siempre que sea dentro de la legalidad deportiva, obviamente) y me encanta y entusiasma por igual ver a un Barcelona cuando se ponde a jugar al fútbol como los ángeles (como nos suele tener acostumbrados) o ver a cualquier otro equipo defenderse con orden, con disciplina, apoyándose los unos en los otros de forma solidaria y realzando el concepto de que el fútbol, por encima de todo, es un deporte colectivo, y como tal hay que plantearlo. ¿Tenía el Atleti de Luis o de Marcel Domingo mucho el balón en su poder? Rotundamente, no. Y jugaba al fútbol como los ángeles, señorías ...
Otra cosa con la que si que puedo estar de acuerdo es que esos mismos periolistos que siempre han puesto a caer de un burro a los equipos por jugar de tal o cual manera, ahora, por el interés te quiero ANdrés, resulten extrañamente devotos incondicionales de dicho estilo.
Pero, sinceramente, para mi el otro día el otro equipo de la capital no ganó el título con un cerrojazo. En la primera parte dio una soberana lección de cómo presionar a un rival tan poderoso como el Barsa, y les recuerdo que las mejores ocasiones fueron todas del lado obscuro.
En la segunda, sí, el Barsa volvió a ser el Barsa, y pudo llevarse el trofeo (dichosos centímetros de Pedrito) pero, en la prórroga, siempre dieron más sensación de peligro los del maligno.
Eso sí, no quiero centralizar este debate entre el uno y el otro, por favor, que gbastante ya tenemos con poner cualquier radio o televisión o medio de incomunicación. Simplemente les pego un cariñoso y superafectuoso (que pijo me ha quedado esto, joder) tirón de orejas, que nuestro Atleti, salvo en la época de Radomir te quiero, ha conseguido todo lo que ha sido jugando al contragolpe puro y duro. Y el que crea que es fácil hacerlo así, que venga a ver ...
Vamos por partes, caballeros...
ResponderEliminarVoy a aprovecharme de que Don Alberto (le presento a los asistentes con mi más sincera bienvenida, por ser persona de bien y de criterio, es decir atlético hasta los tuétanos) acaba de auditarme y no tengo cita con él hasta el año que viene para discrepar con él (aunque sólo ligeramente, que un año pasa muy deprisa).
Estoy de acuerdo con usted en que el toque sin profundidad por sistema es aburrido y, sí, la roja está prostituyendo el modelo implantado por el club de Serrat y por la selección de Luis Aragonés, véase como ejemplo la tan cacareada inclusión en el equipo de los respectivos hijos de Perico Alonso y de Busi, obviamente en posiciones solapadas que lo único que hacen es alejar a Hernández de la creación, lo que se ha notado claramente en los resultados y juego del Mundial con respecto al de la Eurocopa. Dicho esto, los dos partidos del siglo que llevamos en menos de una semana, no han sido tanto un ejercicio de posesión versus a un ejercicio de contragolpe (muy respetable como bien apunta Don Tomi), sino de llevar el juego a un extremo de crispación y de (casi) intimidación a mi juicio inadmisible y solo entendible desde la permisividad de los arbitrajes. Para más inri, está lo que deja entrever Don Fran: resulta que ahora hemos vuelto a descubrir la rueda, el fuego y la Cocacola de una tacada. Déjenme hacer memoria y traer de nuevo a la selección, ¿se acuerdan ustedes de tiempos no demasiado lejanos en que se jugaba con 6 o 7 centrales? ¿se acuerdan del acoso mediático que sufrió el de Baracaldo por concebir el juego de esa manera? (aburrida la mayoría de las veces, no nos engañemos). Sepan que he oído a varios individuos que se rasgaban las vestiduras con él, jurando amor eterno al de Setúbal. Lo que ahora es genialidad antes era taruguismo. ¿Tanta diferencia hay entre Alkorta y el nuevo mediocentro desquiciado que ha reinventado la posición?
Coincido con Don Tomi en que los caminos para alcanzar los éxitos son variados e insondables, pero para mí hay un trecho entre el equipo de Ivic, con la misma idea para todas las batallas y un equipo sin más idea que la anulación del rival para éstas batallas. Sin entrar a valorar el aspecto mediático de las contiendas, ahí me debo alinear con Don Fran, nos encontramos ante la exaltación del complejo de inferioridad como manera de juego.
De acuerdo con Don Tomi en que salvo con Radomir (manda huevos que ahora se lo canten a QSF), no ha habido una apuesta de ese tipo de juego, pero hay muchos otros que me valen, siempre que se hagan bien y como consecuencia de un plan.
Coincido también con Don Alberto en que me gustaría haber podido ver a Mérida en el doble pivote en alguna ocasión, pero ya sabemos que Sensaciones carga a la izquierda a cualquier mediocentro del que sospeche. Aún así Tiago es muy importante en el equipo en su actual estado de forma (otra cosa es que habláramos sobre lo que le ha costado alcanzarlo y si se debe hacer un esfuerzo para que continúe el año que viene).
Toma ladrillo…….
Y Don Fran, lo de Italia sí que me ha llegado al alma ... Uno, siempre acostumbrado a ver a nuestro combinado caer en demasiadas ocasiones a las primeras de cambio, siempre le ha encandilado la competividad, el coraje, el espíritu de superación en uno de los partidos más memorables que uno recuerda, con un Paolo Rossi sencillamente desatado.
ResponderEliminarBrasil era una puta maravilla, es cierto, pero DIno Zoff, Cabrini, Gentile, Scirea, Antognoni, Tardelli, Conti ... Ufff. Qué demostración de carácter y de saber estar. Lo siento, pero tengo que ser fiel a los orígenes del apellido de nick, qué le vamos a hacer.
¡VIVA ITALIA!
A todo ésto, después de que nos quedáramos colgados por no llegar a un acuerdo satisfactorio con un reventa, yo celebré la Final de aquél Mundial en los alrededores de ese Estadio que hay en la Castellana con varios amigos, y con los italianos. Y eso que no llegó al Mundial, por lesión, Roberto Bettega, uno de mis ídolos de la época.
ResponderEliminarPero es que eliminar a Brasil fue un delito. Lo siento. Reconozco decirlo con perspectiva, pues en aquellos tiempos pensé algo parecido a lo que piensa usted, Don Tomi; pero se ve que soy menos fiel.
Acabé hastiado del estilo italiano. Y sobre todo de la murga que durante décadas nos han dado con ello. Justamente hasta que mi tocayo Fábregas les dio la puntillita en la Euro'08 ... cuando, con ese estilo, y esa falta de méritos, y ese oficio, y todo eso, estuvieron a un penalty de mandarnos, como siempre, para casa.
No han levantado cabeza desde entonces, por cierto. Ni nos han vuelto a marear con el "estilo ganador", ni nos han vuelto a vacilar. Ni a nosotros, ni a nadie.
Ha estado muy bien traído el Grande/Fantástico/Injustiiiiiiiiisimamente tratado Tomislav Ivic, y aquella máquina de precisión que estuvo una vuelta completa invicto (de Mallorca a Mallorca y tiro porque me toca, que se dice pronto); pero aquél equipo no era para nada defensivo. No, oiga, no se ría, que lo digo en serio.
Como Luis (antes y después) tenía dos laterales veloces y de largo recorrido, que en realidad ejercían como centrocampistas, y luego tenía a Schuster, a Vizcaíno y a Donato; a Futre y a Manolo ... eran espectáculo puro, y lo siguieron siendo al año siguiente, que culminamos con la segunda Copa consecutiva, en ese mismo Estadio donde ganó Italia ... pero jugando 2.000.000 de veces mejor que Italia.
(Aspiramos hasta el final a esas dos Ligas, por cierto).
En todo caso, como menciona Don Emilio, cite a Clemente. Y entonces le contestaré rotundamente que no, que éramos segundos, siendo los primeros inalcanzables y sin embargo celebré su (estúpido, injusto, loco) cese. Una chorrada, lo sé, teniendo en cuenta que sin él seguimos sin jugar, y encima quedamos cuartos; pero es una cuestión filosófica.
Además, yo supongo que, si fuese de ese otro equipo de Madrid, cosa de la que la Divina Providencia nos ha librado, tal vez estaría contentillo e incluso orgulloso.
Sin embargo, aprovechando que el fútbol es de todo, menos algo cerebral y ecuánime, veo a esa gente desde fuera, y lo que hacen me parece un horror.
Y si encima es el resultado de 1.200.000 portadas elogiosas hasta el paroxismo, de doscientas mil declaraciones hablando de "excelencia", de comparaciones ridículas, absurdas, surrealistas, de quienes asimilan a Messi con ceerresiete; y de una cantidad insultante de millones de inversión, además de un horror, me parece una estafa.
Pero es un plan. Eso sí. Y tiene mérito, sin duda. Lo que pasa es que me aprovecho de que no hablo de mi equipo, y de que tampoco recuerdo a mi equipo, ganando nada, con una posesión del 21%. Y menos mal.
El fondo de todo, según mi humilde opinión, está en esa palabra tan es desuso últimamente en todos los estamentos de nuestra sociedad: coherencia.
ResponderEliminarA mi Italia siempre me ha caído bien, quizá por ese espítitu de gato que siempre se las arregla para caer de pie. Los partidos de Sarriá fueron gloriosos, nada que ver con el Austria-Irlanda del Norte que me tuve que comer yo en nuestro estadio por haber pensado que la selección de Santamaría haría los deberes en la primera fase. Lo de que ese Brasil con Zico, Socrates, Junior, Eder, Cerezo (no se asusten, hablo de Toninho) o Argentina con Maradona naciendo y gran parte de los héroes del 78 se fueran de vacío fue duro, pero fue a manos de una Italia que siguió su plan desde los partidos del grupo en Galicia.
En el caso del equipo del Ser, se ha pasado de echar a un entrenador resultadista pero ganador en busca de la excelencia, pasando por señores de perfil medio o aquilino hasta llegar a la última derivada, la perfección absoluta.
Ivic era muy bueno y el equipo que tenía a sus órdenes tenía bastante más talento que otros que últimamente hemos visto por nuestra casa.
Se han olvidado ustedes de Antognoni, oigan...aunque no contó en ese mundial en la misma medida que otros de menos clase como Marini, Oriali y Graziani
Es curioso, ahora que ha salido el tema puedo recordar resultados, alineaciones, dorsales y caras de prácticamente todos los jugadores de los mundiales 78 y 82. En el 86 ya tengo más dudas, pero, a partir de ahí, tengo nebulosas que me impiden recordar incluso con quién se midió España en las fases de grupos. ¡Qué cosas tiene esto de aprender cuando eres un enano!
ResponderEliminarUsted siempre tuvo una memoria privilegiada amigo, quizas en el 86 empezó su relacion con los liquidos elementos y empezó a resentirse.
ResponderEliminarEl Atleti de Ivic era defensivo, siento discrepar con don Fran, siempre tan juicioso y acertado, meter en una alineacion a Tomas, Donato, Solozabal, Juanito, Juan Carlos, Pizo Gomez, Vizcaino y Toni, que quieren que le diga, y la frase favorita era "los automatismos defensivos", recuerden. Y es que jugar a la contra tambien vale y a veces da equipos durisimos en defensa y letales en ataque, aburridos? Tambien, pero cierto entrenador dijo que el futbol es "ganar y ganar y ganar..." y Brasil jugaba como los angeles de medio hacia arriba pero tambien tenía a Valdir Peres de portero que era un cantamañanas y una defensa mas bien flojita, a mi parecer, y al futbol se gana con equilibrio.El Atleti de Antic atacaba muy bien, pero es que defendía muy bien, y el Tramposo el otro dia defendio bien y le buscó las cosquillas en ataque a un Barsa acostumbrado a equipos que se cierran y apenas salen o a suicidas que adelantan la linea (Abel Resino, recuerdan?). Mi opinión es que a veces echarse atras no es mala tactica para conseguir el objetivo, aunque como espectador sea aburrido, de hecho no estoy de acuerdo en que el Barsa sea aburrido cuando toca y toca, es aburrido el equipo contrario que pone el autobus sin intencion de robar el balon y salir a la contra.
Perdon por el ladrillo
¡Los líquidos elementos! Tanto tiempo elucubrando sobre posibles lesiones degenerativas y Mr. Hooper acaba de dar con la clave tirando de manual, de uno de los estados de la materia.
ResponderEliminarA mi, el automatismo que más me llegó de Ivic es el balón largo de Schuster sin moverse de la circunferencia del centro del campo para que Futre agitara la melena al viento midiéndose con los defensas rivales. Reitero, había un plan, independientemente de que pudiera estar sujeta a debate su vocación ofensiva o defensiva. Ahora tenemos....sensaciones.
Sí, sí, Valdir Peres era muy malo y el delantero centro también, un tal Serginho que no pasará a la historia.
Completamente de acuerdo, el Barsa juega bien, muy bien, pero no es la unica manera de jugar bien. Pero por favor, en un debate de esta altura chirria un poco que aparezca ese chico ojeroso y "mu dergado" como diria el insigne humorista, al que algunos consideramos que hace las alineaciones tirando de bingo casero.
ResponderEliminar- A ver chavales sentaos que voy a empezar, el 21, el 13, el 19, el 8...
-Joder, siempre los mismos (por lo bajini)
- Forlan, que te estoy oyendo! el 27, el 17...
- Mister, que han salido dos porteros
- Cagüen, Reyes, quieres jugar por la izquierda?
- Jozu mizter, que ya zabe que yo...
- Vale, Joel, hoy juegas de extremo izquierdo, tengo la sensación de que lo vas a hacer bien, y dejad de mirar las bolas coño, que ya os he dicho que el 18 y el 11 estan
Y a mi que me da que el 18 y el 11 no entran en el bombo.
ResponderEliminarAcabo de ver la enésima exhibición del colibrí de Sanlucar, de nuevo rozando la excelencia de la intrascendencia. Dentro de nada le llamará el señor Marqués.
Vaya,hacia donde a ido derivando la línea de comentarios.El señor escribano nos deja un post sobre los niños del Atleti,y la cosa termina en la Italia del 82.Curiosa selección ésta,por cierto.Pasa la 1ª fase con 3 empates,y sólo 2 goles marcados,y termina la competición arrasando a la Alemania de Rummenige,en la final.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con D.Emilio.La clave siempre,tener un plan.Luego ya se podrá entrar en el regusto que le produce a cada cual el estilo del equipo.El que mejor ha plasmado,sobre un césped,eso de que existen distintos caminos para llegar a la meta(jugar bien y ganar),es el inevitable Zapatones.Maestro del contragolpe,y famoso por ello; y sin embargo, a la vez,creador de la selección de posesión y toque,campeona de Europa.¿Contradictorio?,no,ganador.Aprovechamiento de los recursos disponibles en cada momento.Pura inteligencia.
Algo que no parece habérsele pegado a nuestro ínclito técnico actual.
No he sido nunca muy de Clemente,pero la España del mundial 94(creo que fue ese año,en USA)era una selección de semifinales/final,por lo que demostró sobre el campo.Con mucho músculo,y el cerebro que ponía Caminero.El fútbol nos demuestra,día a día,y año a año,que nadie tiene ni zorra idea de esto.
Gran aportación Don Charly, no se podría haber utilizado un ejemplo mejor: Don Luis Aragonés.
ResponderEliminarAhondando en el tema de QSF, hoy he leído opiniones que se planteaban la idoneidad de su continuidad en base a que parece que al final de temporada ha dado con la tecla. Para mi eso es el elemento diferencial para que no deba seguir y es la antítesis de lo que apunta usted, desaprovechamiento sistemático de los recursos.
El mundial USA lo recuerdo por el bajísimo nivel de fútbol y por la cantidad de partidos resueltos en la tanda de penaltis. Aún así yo salvaría a Caminero, al mejor Romario, a Bulgaria fumando en los entrenamientos y jugando como los ángeles con Hristo, Letchkov y Balakov
Por cierto,Don Anfitrión,enhorabuena.
ResponderEliminarYa sabe ud, por su debut en una web tan prestigiosa,entre los atléticos,como es LVR.
Perfectamente merecido.
Muchas gracias Don Charly, siento no haberles podido avisar de la premiere pero es que hasta que no he leido su comentario no me había dado cuenta.
ResponderEliminarSí, sí, a partir de ahora también podrán encontrarme por allí gracias a Don Sergio Medina y a su irresponsabilidad por hacerme un hueco chiquitito en ese gran sitio.
Dejo el link para los no iniciados:
http://www.lavidaenrojiblanco.com/
Yo le doy más la enhorabuena a Don Sergio Medina, por el acierto en el fichaje y la habilidad en la incorporación de Don Emilio, que al propio autor.
ResponderEliminarMe explico: no criticaré públicamente a LVR, en la que habré intervenido cientos de veces como soldadito atlético raso, sino que defiendo el modelo de pequeña "tienda de la esquina" frente al centro comercial grandote, incontrolable, masificado e impersonal.
Dicho lo cual, el nivel de ese lugar acaba de subir vertiginosamente, por supuesto.
En cuanto a la estupendísima discusión sobre estilos de fútbol, sepan que escribo sin poder evitar pensar que "la batalla" está perdida.
ResponderEliminarPese a todo, me explico. Por discutir, más que nada. Estimado Sr. Hopper: Pizo no era lo que se dice un fino estilista, pero tampoco defensivo; y a Toni le quedaba un año para empezar a pintar algo en el equipo (cuando fue capaz de luchar por el puesto con el Nanu Soler, que llegó como rutilante cedido).
Tomás y Juan Carlos subían y bajaban sin parar, de tal manera que actuaban como centrocampistas en ataque; los tres centrales (Solozábal-Donato-Juanito) tenían un nivel técnico notable, lo que les permitía salir con el balón controlado en cualquier momento, cualquiera de los tres y, a partir de ahí, Vizca y Pizo curraban, para que Schuster, Futre y Manolo se lucieran a su antojo.
Abel batió el récord de imbatibilidad ese año, cosa que evidentemente no se consigue sin un excelentísimo sistema defensivo, pero aquél equipo atacaba, y además lo hacía constante e indistintamente por una banda u otra, o por el centro.
Luis, en la temporada seguiente, mantuvo el mismo sistema y, básicamente, el mismo equipo base, aunque le dio más bola a Aguilera, Toni-Soler y Moya, que en realidad nunca cuajó del todo ... y no me digan que aquél Atleti del 92, que ganó la Copa a los otros y se quedó a dos-tres-cuatro puntos de ganar la Liga, era defensivo o despreciaba la posesión.
¡Qué tiempos aquellos! No les digo más que gastaba yo una flequillo que provocaba suspiros (y alguna que otra hiperventilación), tuve que domarlo debidamente para poder ponerme el casco de obra con el que fuimos al estadio ese que parece una cárcel. Ahora provoco deslumbramiento cuando el sol me da de lleno en la calva.
ResponderEliminarGracias por sus palabras Don Fran, se intentará estar a la altura del exigente lector durante este periplo (ardua tarea, lo admito)
Don Fran, no tome lo de "defensivo" como algo peyorativo, intentaré explicarme mejor.
ResponderEliminarPara mi hay dos formas de ser defensivo:
1. El equipo se defiende en su campo, cierra espacios y hace ayudas (los famosos automatismos de Ivic o los pasillos de seguridad de Luis)para recuperar el balón y salir con velocidad y pocos toques hasta la porteria contraria, lo que toda la vida ha sido jugar al contraataque, eso que dicen que inventó Marcel Domingo y que el Atleti siempre hizo tan bien. Para mi eso es una forma de jugar a ganar, el equipo esta equilibrado, concede pocas ocasiones y crea espacios en ataque aunque no tenga mucho el balon. La Italia de Bearzot sabia de esto, por eso ganó ala desequilibrada Brasil en el 82, que atacaba mucho pero no defendía un pimiento
2. El equipo defiende en su campo y hace mas o menos lo mismo que en la opcion 1, pero en ataque coloca un delantero diana y cuando tiene el balón pega el pelotazo a ver si hay suerte, el hombre diana toca el balón y favorece el rechace (lo que algunos iluminados llaman la segunda jugada), o si no una jugada a balon parado, aprovechando que se juega con tres centrales o mas y el diana, todos altos y fornidos. A mi eso me parece jugar a la lotería. Hay un sinfin de entrenadores que juegan a esto conocidos por todos, desde Capello, Clemente hasta el vecino de enfrente aunque luego salga en rueda de prensa a decir que tenia un plan ganador y eso, ayer jugo a hacer 30 faltas, empantanar el partido y empatar a cero, y si hay suerte...
Resumiendo, que hay mas formas de jugar bien que tener posesion de balon, tocar rapido y presionar arriba para recuperar pronto (como el Barsa, España o el Atleti de Antic)aunque esta última sea mas resultona
De acuerdo con usted en que todo esto es solo por discutir, pero eso es lo divertido, no?
Efectivamente el ejemplo de ayer es una clara opción 2 de las que plantea Mr. Hopper. De todas formas e independientemente de las formas de macarra de pista polideportiva, me gustaría pensar que algún empleado del Ser (o el Ser mismo, oigan, si no anda pendiente de hacer alguna torre nueva) debe alucinar con esos principios de si no me llegan a expulsar a uno, llegamos al final con 0 a 0 tan a gustito.
ResponderEliminarÉste va conseguir que Maguregi sea recatalogado como entrenador que apuesta por el espectáculo, madre mía.
Imagino que las glorias deportivas se deben estar removiendo en sus tumbas o en sus geriatricos, don Emilio. Mas concretamente si al que le dieron el botellazo en Yugoslavia levanta la cabeza coge al que nunca se benefició de los errores arbitrales (expulsión injusta de Andrade en las semis con el Depor,gol en fuera de juego a lo Mijatovic de Milito en las semis del año pasado) y lo saca a gorrazos de la cuadra. Lo que pasa es que tiene suerte de que ese ya no está, el presidente de honor solo balbucea (o fue asi siempre?) y a Jorge el de los circunloquios no le apetece que le vuelvan a coger del cuello. En fin, lo que usted atinadamente siempre dice, que reparto de señorio en las espinillas contrarias oiga!!!
ResponderEliminarHombre Don Hopper, me pone usted un ejemplo que vaya. El hombre que de manera cuasi profética vio que el piercing sería algo aceptado en nuestros tiempos y quiso implantar la tendencia en Matthaus.
ResponderEliminarNo he oído ninguna valoración del rapsoda sobre el estilo propuesto por el Setubalero o Setubalense (que no ando ducho en patronímicos con bacalao dourada), pero estamos ante otro ejemplo de coherencia, sin duda.