miércoles, 2 de noviembre de 2011

Halloween...o como se diga eso

– ¿Y todas esas calabazas? –preguntó Doña Enriqueta

– Doña Enriqueta, que mañana es Hollywood –dijo muy serio el frutero mostrando un dominio innegable de las tradiciones sajonas.

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No es que no me guste Halloween, no es eso. Vaya por delante que, si los más pequeños de la casa pasan un buen rato con esta nueva manera de celebrar una fiesta de toda la vida, a mi me vale. Aunque uno sea más de castañas que de pintarse marcadas ojeras. Aunque uno haya visto en los dos últimos días disfraces de esqueleto, de bruja sexy, de asesino en serie, de piratas zombies sexys, de demonio y de vampiresa sexy y acabe preguntándose si se trata de una celebración de lo que da miedo o de la casquivanía. Aunque uno prefiera escribir esto el día de difuntos con unos buñuelos en la boca del estómago, como se hacían estas cosas antes….

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Cindy y Junior apresuraron el paso una vez que el ayudante del sheriff del condado les dijo que todo estaba bien… ¿Estaba bien?...La playa estaba desierta, como correspondía a esa época del año. Solo al fondo, casi al lado de la orilla, se veía un capazo del que sobresalían unos bracitos que intentaban agarrar el aire que los rodeaba. Habían pasado dos días infernales. Nunca pensaron que se podía pasar tan mal ¿A quién se le podía ocurrir raptar a una niña de cinco meses? A las horas interminables llenos de ansiedad había que sumarle las miradas escrutadoras de aquellos que acostumbraban a juzgarles: “¡Qué se puede esperar de unos padres así!”, decían algunos que seguían sin entender aquel embarazo nada más graduarse que impidió que Junior fuera a la universidad con la beca de fútbol que le otorgaron. La vida daba vueltas constantemente, ahora estabas arriba, mañana abajo. El quarterback del equipo de la localidad y la capitana de animadoras ahora trabajaban a tiempo parcial en la gasolinera de Dale y vivían en una caravana a la salida de Appletree Hill. Justo en el desvío anterior del cartel de salida del pueblo: “Está usted dejando Appletree Hill. Seguro que volverá”

Seguían avanzando ansiosos por estrechar en sus brazos a la pequeña. Querían que todo terminara. A nadie le hace gracia que el canal 9 de Maine pase dos días hablando de ti y que planten una unidad móvil a diez metros de la puerta de tu casa, bueno, de tu caravana. Allí donde la niña desapareció en un descuido. Uno pensaba que estas cosas solo pasaban en la tele. Ahora les había pasado a ellos. Por fortuna todo parecía haber acabado… ¿Seguro que había acabado?... Llegaron a la altura de la niña. Cindy la abrazó, recorriendo con las manos la pequeña anatomía para asegurarse de que estaba bien…No estaba bien. Una madre sabe de estas cosas… Parecía sana, incluso se podría decir que había engordado en esos dos días. Sería una sensación, un bebé no puede engordar demasiado en tan poco tiempo. La miro frente a frente. La mirada le pareció extraña. Distinta…No es ella, no sé lo que es pero esta no es mi hija...Se obligó a apartar de la cabeza esos pensamientos. Serían las noches sin dormir. Junior la cogió para hacerle cosquillas debajo de la barbilla y provocar esa risa que todo lo curaba. Entonces se dieron cuenta. La niña sonrió mostrando unos dientes perfectamente alineados, unos dientes amarillentos. Dientes de fumador o de alguien que abusaba del café no de un bebé. Los bebés no tenían dientes. “Está usted dejando Appletree Hill. Seguro que volverá”…Ella no había vuelto…



Espero me permitan la licencia de inspirarme en la manera de contar las cosas del señor King, referencia en lo que a historias del tipo que nos ocupan se trata. No solo dos días, veinticuatro años llevamos durmiendo mal. Veinticuatro años de pesadilla. Muchos años cogiendo en brazos a nuestro equipo y notando algo raro. No es él. El equipo que se marchó entonces era conocido por luchar por todos los títulos, aún cuando de antemano parecieran perdidos…derrochando coraje y corazón…Un equipo al que ahora miramos y no acabamos de reconocer. Un equipo que ha mutado en sociedad anónima deportiva y que mengua a ojos vista en arrojo, patrimonio e identidad. Da miedo, la verdad. Da miedo un presente marcado por la turbiedad en la gestión y la irrelevancia en lo deportivo. Da más miedo todavía un futuro con la institución esquilmada.

Da bastante miedo también, terror incluso, pensar en que una aplastante mayoría de los aficionados firmarían sin dudar un solo segundo el tercer o el cuarto puesto…cuando quedas entre todos campeón…Terror produce asimismo el asumir ridículos con naturalidad y comprensión…que esta tarde también peleará…Canguelo produce la constante búsqueda torpe de enemigos entre los que nunca lo fueron sin reparar en que el principal enemigo se sienta en un sillón de orejas tapizado recientemente pero pagadero a 120 días, como casi todo…porque siempre la afición se estremece con pasión… Pánico se percibe entre los que no acaban de entender qué demonios tienen que ver los fondos de inversión con el balompié...a un equipo de verdad…Repelús da ver como los jugadores pasan fugazmente por una entidad que se las ve y se las desea para encontrar referencias…defendiendo sus colores…Grima da pensar que no tenemos casa: un estadio vendido y otro del que se promete recurrentemente su construcción inminente como si del cuento del lobo se tratara…Yo me voy al Manzanares…Prevención produce el que cada vez acuda menos gente al estadio y el que haya habido tantos buenos atléticos que han tirado la toalla abandonando su abono…donde acuden a millares…Pavor experimenta el que analiza la realidad atlética y constata que tras esa sonrisa amigable de club moderno se esconden unos dientes amarillentos de deudas, apropiaciones indebidas, enriquecimiento a manos llenas y vueltas rápidas a la M-30.

“Está usted dejando el Calderón. Seguro que volverá”…El Atleti hace tiempo que no vuelve…Y eso nos debería dar miedo…y pena también. Mucha pena.

3 comentarios:

  1. Muy bueno su último párrafo, señor Emilio. Muchas verdades dice usted acompañadas de nuestro insigne himno. Aunque no se preocupe, cuando nos vayamos a la Peineta ya lo cambiarán y entonces lo harán más acorde a nuestra realidad actual...

    Si me permite, aquí le dejo un análisis del Udinese

    Un saludo

    PD: Habitualmente cuando comento en su blog me dice que me cuenta no tiene permiso para ver esta página y me hace volver a meter mi contraseña de Google... ¿Sabe algo del asunto?

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  2. Concretamente me dice que mi cuenta de Google no tiene ACCESO para ver esta página. Me hace salirme y volver a meter mi Usuario y Contraseña. Me acaba de ocurrir de nuevo... y sólo me pasa aquí.

    Saludos

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  3. Creo que ya han pedido a Gonzalo Miró un esbozo del nuevo himno, en versión maqueta vamos. Será algo así como: "Me desplazo a la Peineta..."

    Acertado y minucioso análisis el que hace usted del rival de hoy. Baste decir para los no iniciados que se trata del más italiano de los equipos italianos que pululan por la serie A actual.

    PD:Me pilla usted en lo de google. Uno para estas cosas es un inútil integral. Un Cerezo de las nuevas tecnologías, vaya...

    Saludos

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